Mujeres espías del 3-B

"Personajes" que dejaron o pretendieron dejar huella en la Historia Militar de la Gran Guerra.

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Juanjo_93
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Mujeres espías del 3-B

Mensaje por Juanjo_93 »

Junto a Mademoiselle Doctor y Mata-Hari hubo otras mujeres que también fueron captadas por el Servicio de Inteligencia del Reich, estas son sus degraciadas historias

Rose Ducimetière.

Rubia, bonita y jovial, lo que se dice un “cañón”. En 1914, en París tuvo un idilio con un suizo, un tal Walter, quién para agradecerle su amor, la prostituyó, ejerciendo en la Estación del Este donde aliviaba los bolsillos a los soldados que partían al frente. Como quiera que empezó a enterarse de confidencias de tipo militar, su “protector” el tal Walter pensó que le podría dar otra aplicación más a su amada, así que respondió a un anuncio publicado por un organismo literario de Ginebra que actuaba como tapadera del 3-B (Servicio de Información Alemán), solicitando colaboradores en Francia.

Rose se trasladó a Italia como enfermera voluntaria, comenzando a transmitir información a su amante. En octubre de 1916 entró a trabajar en el Hospital de Val-de-Grâce, pero fue detenida gracias a los Servicios de Censura Postal, que descubrieron los mensajes con tinta simpática enviados a Walter en Suiza.

Un consejo de guerra la condenó a muerte el 24 de abril de 1917, por fortuna el presidente Poincaré le conmutó la pena capital por trabajos forzados a perpetuidad. Murió en un penal en 1933. Su querido Walter, sin embargo, fue ejecutado.

Marguerite Francillard.

Otra guapa rubia de Grenoble. A los 18 años se enamoró del alemán Ludwig Rehm, viajante de comercio y por supuesto espía. Marguerite se dedicaba a recoger de los buzones los informes de otros agentes y los llevaba a suiza a su amado Ludwig.

Fue detenida en París y encarcelada en Saint-Lazare en el pabellón número 12, famoso por haber albergado a las señoras Steinheil, Caillaux y Mata-Hari. Juzgada por un consejo de guerra, fue condenada a la pena capital y fusilada en Vincennes al alba del 11 de enero de 1917.

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Marussia Destrelles.

Artista de teatro sin gran talento que realizaba sus giras entre París y Ginebra, en ésta última capital aprovechaba para visitar a su hermano en la cárcel acusado de espionaje para los alemanes. Como cruzaba la frontera cada dos por tres, un coronel avispado un tal Gourguen, jefe del Deuxième Bureau de Annemasse que controlaba las redes en Suiza decidió tenderle una trampa dejándola que copiara en una oficina de contraespionaje francés una lista falsa de agentes aliados que operaban en los territorios ocupados, entre la relación de nombres estaba el de un agente francés llamado Destrelles que se sospechaba era un traidor.

Marussia vendió la copia a precio de oro a los agentes del 3-B. Tres semanas después, el agente francés era detenido y fusilado cerca de Charleville por los propios alemanes. El Servicio de Contraespionaje Francés comunicó la verdad a sus homólogos del 3-B, Margueritte se había burlado de ellos. El coronel evientemente salió a hombros después de esta faena.

La respuesta fue que la artista fue hallada envenenada en una habitación de un hotel de Ginebra. El cadáver yacía en el suelo cubierto de flores junto a un tubo de veronal.

Eva de Bournonville.

Sueca descendiente de franceses. Buena educación y políglota. Trabajó de enfermera en un hospital militar francés antes de regresar a Suecia, donde la reclutó un agente alemán.

Instalada en Londres comenzó su corta labor de información, ya que fue detenida el 15 de noviembre de 1915 por Scotland Yard, al serle interceptada las cartas que enviaba a Suecia.

Juzgada en Old Bailey el 12 de enero de 1916, fue encerrada en la prisión de Aylesbury de donde salió en libertad en 1922.

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Marie-Edwige de Popovich.

De origen serbio. La antítesis de las anteriores, pequeña, gorda, voluble e irascible, vamos una prenda. Llegó a Malta para cuidarse su deteriorada "salud", aunque la verdad claro está era que empezó a mandar extraños telegramas. La investigaron y le descubrieron un diccionario de holandés con palabras subrayadas que coincidían con las de los telegramas enviados y la dirección de un corresponsal en un puerto mediterráneo.

Se la remitió a Londres con todas las pruebas para que Scotland Yard resolviera el enigma. Dada por loca, escapó a su juicio y fue encerrada en la cárcel de Aylesbury hasta el fin de la guerra, de donde pasó al manicomio.

Otras espías con peor suerte fueron:

Marguerite Schmidt, ejecutada en marzo de 1915; Ottilia Voss, en agosto de 1915; Marie-Josée de Basi, en enero de 1916; Régine Diane, fusilada en enero de 1918; Joséphine Alvarez, en mayo de 1918; Victorine Francher, en mayo de 1918 y Sidonia Ducret en junio de 1918.
Última edición por Juanjo_93 el 11 Jun 2007, editado 1 vez en total.


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Juanjo_93
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Mensaje por Juanjo_93 »

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