Cuando Hollywood venció en la SGM
Publicado: 11 Dic 2018
Tom Hanks durante el combate final de la película Salvad al Soldado Ryan (Steven Spilberg 1998)
Cuando se pregunta a día de hoy a los ciudadanos europeos sobre qué nación fue la que contribuyó de forma más decisiva a la victoria sobre la Alemania nazi casi el 60% de los encuestados señala a los Estados Unidos, sin embargo, cuando esta misma pregunta se hacía en los años cincuenta del siglo pasado se señalaba en un porcentaje casi similar a la Unión Soviética. ¿Qué ha pasado en esos cerca de 50 años? La respuesta es evidente, muchas y buenas películas de Hollywood sobre el decisivo papel de sus tropas en la victoria aliada.
Si nos remontamos a esos años el panorama político estaba dominado por la confrontación entre dos grandes bloques políticos, las democracias populares y su sistema económico de planificación central, cuyo líder indiscutible era la URSS, y los países democráticos y de economía capitalista, encabezados por los Estados Unidos. En ese momento a las autoridades norteamericanas les pareció una gran idea hacer de Hollywood una máquina de propaganda. El cine conseguiría convencer a los europeos que si Hitler y sus tropas fueron derrotadas fue gracias a la inestimable contribución estadounidense.
El elenco de superproducciones hollywodienses desde finales de los cincuenta y durante la década posterior es numerosa y de una calidad extraordinaria, iniciada por El puente sobre el río Kwai (1957) fue seguida por El día más largo (1962), La gran evasión (1963 y en los setenta serían un auténtico taquillazo y película de culto Un puente lejano (1977). La puntilla de este tipo de filmes se produciría con dos auténticos blockbuster Salvad al soldado Ryan (1998) y Pearl Harbour (2001), en unos años donde el mundo comunista ya se había hundido, víctima de sus contradicciones internas.
Un reparto de lujo, de izquierda a derecha: Gene Hackman, Ryan O´Neal, Michael Caine, Edwad Fox y Dirk Bogarde.
El cine de propaganda sobre la Segunda Guerra mundial ya había comenzado durante la propia contienda y americanos, Treinta segundos sobre Tokio (1944), o alemanes Feldzug in Polen (Campaña en Polonia - 1940) rivalizaban en los cines de sus respectivas naciones intentando animar a civiles y militares.
Sin embargo, en la Europa occidental el cine soviético sobre la guerra apenas tuvo difusión, por ejemplo el filme Cuando pasan las cigüeñas (1958), ganador del festival de Cannes no tuvo un éxito comparable a la de las películas americanas. Así que poco a poco, la sociedad occidental, cada vez más influenciada por la cultura de masas y hoy en día las redes sociales, se fue convenciendo del papel capital que tuvieron los norteamericanos en la derrota alemana.
Durante los últimos años tanto los chinos con películas como Ciudad de Vida o muerte (2009) como los rusos con La fortaleza de Brest (2010) han ido comprendiendo la importancia de este juego de propaganda que se realiza a través de la gran pantalla.
Hacer una lista de películas sobre la Segunda Guerra mundial sería un trabajo colosal, ya que cada vez más países se han sumado a este género, incluso España con títulos como Silencio en la nieve (2011), una correcta película de intriga ambientada en la estepa rusa y la división española de voluntarios, o Ispansi (2001), sobre los niños enviados a Rusia.
Escena de la película española Silencio en la nieve (Gerardo Herrero, 2011)
Lo cierto es que el aficionado al buen cine y a la Segunda Guerra mundial seguro que puede añadir más de una decena de títulos de su propia cosecha a este brevísima introducción al tema. Eso es por ejemplo lo que hizo José Miguel Sales en su libro sobre La Segunda Guerra Mundial en el cine.
Fuente: http://terciosviejos.es/es/xipblog/post ... _type=post