Grandes Capitanes

[Buscaglia]

Comprados un par de ejemplares ... antes de saber lo del descuento.

[lonesomeluigi]

Comprados un par de ejemplares ... antes de saber lo del descuento.

¡¡¡Me alegro de que aunque sea brevemente aparezcas por estos lares amigo Buscaglia!!!
Un abrazo.

[malarky]

Menudo trabajo, me alegra que por fin vea la luz este tan esperado proyecto. Tiene una pinta estupenda y la portada es tan soberbia como nos tiene acostumbrados Dalmau.
Yo solo decir que me siento abrumado por tener el honor de ser uno de los escogidos para haber participado en el proyecto. Agradecer a todos los que habéis sudado sangre para poder editar el libro (admito que corregir mi trabajo puede generar frustración ), os merecéis toda mi admiración

[Lutzow]

2X1, ¿Quién da más?



Me ha gustado el tacto, tamaño, formato, con la misma calidad que el anterior libro; por no hablar de portada y contraportada, todo un lujo... Anímense compañeros, les aseguro que vale la pena hacerse con él...

Saludos.

[FJavier]

Comprados un par de ejemplares ... antes de saber lo del descuento.

¡¡¡Dichosos los ojos!!! qué alegría volver a leerte.

[Buscaglia]

Ciertamente, el volumen es tan bueno que se puede devorar de un tirón... así que se impone el racionamiento (algo, además, muy bélico): me he propuesto deleitarme con los excelentes once artículos uno a uno.

Después de leer los cinco primeros, compruebo que el objetivo está más que cumplido. Pocas veces he visto unir mejor la divulgación con el rigor. El de Anibal me parece una síntesis magistral sobre un tema dificilísimo de abarcar por su magnitud (lo único que he echado de menos es alguna referencia a las razones de política interna de Cartago que explican que se sabotease la campaña de Aníbal desde la metrópoli, pero entiendo que las dimensiones del artículo no lo permitían). De Gainas, del que todo ignoraba salvo su nombre y ocupación, ahora conozco casi tanto como nuestros "experten" de Historia Antigua y eso es un puntazo. El artículo sobre Saladino hará que nunca más ponga a mis alumnos "El reino de los cielos" pues me volvió talibán. Logra además algo bien complicado: exponer en claro y con lógica una sucesión de campañas, aceifas y batallas que en otros libros de Historia he leído superpuestas sin sentido, orden ni concierto. Con Nobunaga, su brutalidad y genialidades, he disfrutado como si de un episodio de Juego de Tronos o la mejor peli de samurais se tratara. Y, para colmo, ¡es real y no ficción! De Piccolomini ya de antemano sabía que me iba a gustar. Por su origen y porque, desde que vi "El último valle" hará unos cuarenta años, me fascina el período y los personajes.

En resumen, el libro me está encantando y, considerando los artículos que vienen a continuación, seguro que seguirá haciéndolo.

[Rafa.Rodrigo (kappo)]

Ciertamente, el volumen es tan bueno que se puede devorar de un tirón... así que se impone el racionamiento (algo, además, muy bélico): me he propuesto deleitarme con los excelentes once artículos uno a uno.

Después de leer los cinco primeros, compruebo que el objetivo está más que cumplido. Pocas veces he visto unir mejor la divulgación con el rigor. El de Anibal me parece una síntesis magistral sobre un tema dificilísimo de abarcar por su magnitud (lo único que he echado de menos es alguna referencia a las razones de política interna de Cartago que explican que se sabotease la campaña de Aníbal desde la metrópoli, pero entiendo que las dimensiones del artículo no lo permitían). De Gainas, del que todo ignoraba salvo su nombre y ocupación, ahora conozco casi tanto como nuestros "experten" de Historia Antigua y eso es un puntazo. El artículo sobre Saladino hará que nunca más ponga a mis alumnos "El reino de los cielos" pues me volvió talibán. Logra además algo bien complicado: exponer en claro y con lógica una sucesión de campañas, aceifas y batallas que en otros libros de Historia he leído superpuestas sin sentido, orden ni concierto. Con Nobunaga, su brutalidad y genialidades, he disfrutado como si de un episodio de Juego de Tronos o la mejor peli de samurais se tratara. Y, para colmo, ¡es real y no ficción! De Piccolomini ya de antemano sabía que me iba a gustar. Por su origen y porque, desde que vi "El último valle" hará unos cuarenta años, me fascina el período y los personajes.

En resumen, el libro me está encantando y, considerando los artículos que vienen a continuación, seguro que seguirá haciéndolo.

Por el análisis, por las palabras y por seguir escribiendo....

[Buscaglia]

Terminado el artículo sobre Carlos XII. Pensé, a priori, que no me iba a gustar. El personaje me resulta antipático (sólo un gran país como Suecia puede haber sobrevivido a líderes como este y quedar incólume) y, además, es un personaje bien conocido, así que el factor sorpresa estaba descartado. Sin embargo, su lectura me ha encandilado. ¡Qué bien escrito! Un estilo magistral: el adjetivo exacto, la cita justa... todo lo adecuado para proporcionar el tono de epopeya que redimiese al personaje. ¡Pura épica! Como releer "Los héroes" de Carlyle.

[Noviscum Deus]

Es que el estilo de Urogallo es muy particular. Como diría Michaleen Flynn: ¡Homérico!

[Buscaglia]

Excelente el artículo sobre Ney.

Y me lo ha parecido sobre todo porque permite vislumbrar la evolución vital del mariscal: de genio militar a hombre en declive, sin criterio claro o discernimiento. Muy a menudo los grandes capitanes son como James Dean, brillan refulgentes y hacen un bonito cadáver (Alejandro o Carlos XII). Otros mantienen un tono excelente o medio-alto toda su carrera (Aníbal o Piccolomini). Lo cierto es que tendemos a considerarlos "hombres de una pieza" y el artículo muestra que no son así. ¿Quién no hubiera querido tener a Ney en su bando en Rusia? Y, por contra, ¿quién le hubiera entregado un mando en Waterloo? El éxito, la vida, las comodidades, los fracasos... nos cambian. A menudo, a peor.

Lo dicho, excelente artículo.

[Buscaglia]

Una gran elección, Cabrera. Sin ella, el volumen hubiera concluido sin una figura imprescindible entre los grandes capitanes: el caudillo guerrillero. Categoría, además, en la que los ibéricos han brillado especialmente, desde Viriato a Cristino García. Por otro lado, un artículo que hace justicia al protagonista porque para saber actualmente sobre Cabrera hay que ir a la historia de Lafuente y otras obras decimonónicas o hacer una búsqueda por obritas de Historia local y artículos de revista muy dispersos.

No ha tenido tanta suerte Cabrera como personajes muy menores (pienso, por ejemplo, en el el libro la Cruz Sangrienta, con las andanzas del cura Santa Cruz, donde descubrí que un antepasado mío sirvió en su partida) a la hora de disfrutar reediciones y este artículo cubre muy bien el vacío. Como era de esperar, información brillantemente expuesta, con enorme rigor y orden, de unas operaciones tremendamente enrevesadas. El único fallo: que se lee en un suspiro. Y, aunque uno no simpatice con la causa, no puede menos que pensar "¡Tenían que haber asaltado Madrid!".

[Rafa.Rodrigo (kappo)]

Gracias por los elogios "al personaje" claro está jejejeje....

[FJavier]

Buscaglia, parece que te hemos contratado como crítico literario

Muy buenas críticas, es un placer leerte ...................... y lo sabes

[MiguelFiz]

Buscaglia, parece que te hemos contratado como crítico literario

Ejem... en realidad si se le envio un cheque... lo malo es que seguramente el tono de sus criticas comenzara a volverse mas acido cuando se de cuenta de que dicho cheque es de "hule"...

[Buscaglia]

Yo estoy encantado porque este hilo me brinda la ocasión de retornar a Gran Capitán. Para remarcar la labor, callada y eficaz, de quienes han preparado esta antología, estableciendo contactos, cerrando pactos y convirtiendo unos artículos "de su padre y de su madre" en un volumen uniforme y coherente. Una labor callada, anónima y meritoria, la de la fiel infantería, que suele quedar oscurecida, precisamente, por los Grandes Capitanes. Estoy encantado, además, porque el libro es sensacional .

El artículo que leí ayer versa sobre Garibaldi, pero el americano. Otro Gran Capitán del que, reconozco, poco sabía antes de las revoluciones de 1848 (¡este dichoso eurocentrismo!). Y, aun sintiendo simpatía por el "risorgimiento", quizá debido a las lecturas infantiles de Edmundo de Amicis, reconozco que lo que necesitábamos en la vieja Europa era conocer más sobre el Garibaldi "ciudadano del mundo" y líder militar en América, líder todavía en formación. Algo muy difícil de lograr por aquí debido a que las fuentes que ha utilizado el autor son inencontrables en el hemisferio oriental.

Del autor, por otro lado, solo podíamos y podemos esperar lo mejor. Además de uno de los puntales del foro, auna como nadie la sutilidad y la vehemencia, lo mismo que su elegido protagonista. Un relato histórico que lleva el olor a sal de las mejores novelas de aventuras del XIX y que recomiendo fervientemente.

[Tosk]

Te lo iba a decir por MP pero lo digo por aquí, amigo (no hay nada que ocultar cuando se habla desde la sinceridad fraternal):

me llenan de orgullo tus palabras...de verdad!!

Creo que tampoco es para mucho, pero eso quizá sea porque uno es sobre exigente demás con lo que busca aportar, pero me alegra saber por tus palabras que he hecho justicia con el personaje de Garibaldi (sobre todo porque es una figura que me va de la mano, hasta en lo familiar).

Muchas gracias hermano, me has alegrado el día.

[Buscaglia]

Muchas gracias hermano, me has alegrado el día.

Y tú a los lectores.

PD Sabíamos de tus relaciones familiares con la marinería del Trento, pero nada que se remontase al XIX.

[Tosk]

Si la primera "oleada" de familiares (del norte, la segunda vino del sur)vino por esa época, muy garibaldinos...como muchos buscando Buenos Aires terminaron en Montevideo. Aún de chico todavía escuchaba atentamente las historias de Garibaldi contra Rosas. La huella de Garibladi está en todo el Uruguay: es considerado figura histórica de las Fuerzas Armadas (sobre todo en la Marina), de uno de los partidos políticos, y de varios descendientes de italianos.

Y monumentos en varios puntos:

Frente a la bahía de Montevideo (no son mis fotos si quieren subo las más de estos monumentos).



En Salto, donde fue la batalla de San Antonio



Todavía está, como reliquia familiar el busto a Garibaldi en lo de la nonna.

[Buscaglia]

Interesantísimo , ignoraba el carácter tan popular de Garibaldi en Uruguay. Y la Historia tiene otro regusto cuando se funde con la propia vida y la de nuestros mayores.

Ahora bien, ese monolito de Salto... ¿se hizo con fondos procedentes de Italia en los años 20 ó 30? Lo señalo porque la tipología del monumento es puramente fascista.

[Tosk]

Sí señor, buen ojo!! En uno de mis libros en casa tengo esta información, pero como internet es una biblioteca enorme cito de esta página

Fue construido en campos de San Antonio, donde se librara la batalla del mismo nombre el 8 de febrero de 1846, durante la Guerra Grande.

El monumento es obra del arquitecto Juan Veltroni, de marcado estilo art decó, tanto en su arquitectura como en su diseño topográfico.

Fue inaugurado el 25 de noviembre de 1934 y es además mausoleo, ya que guarda los restos mortales de los caídos en esa batalla, los legionarios Policarpo Seghino, Doménico Ottonello y Antonio Piovano, entre otros.

Otro hecho poco conocido y publicitado es que en el año 1941 la Asociación Italia Libre de la ciudad de Salto, en un acto público propició el retiro de los símbolos fascistas colocados en el momento de su inauguración por el gobierno italiano de la época; por lo tanto, también fue declarado Monumento Histórico Nacional este Obelisco-Monumento a Giuseppe Garibaldi.

Por lo que vi de fotos más antiguas, el monumento estaba decorado con sendas fasces a cada lado. Salto es el lugar natal de mi esposa, quien como Anita tiene sangre brasileña (pero también mezclada con sangre vasco-francesa). Una ciudad con una colectividad italiana muy importante.

Otro tema no menor...para nada menor: Garibaldi fue iniciado en la Masonería en Montevideo.

[Buscaglia]

Manteuffel ¡existía antes de la ofensiva de Las Ardenas !

Un artículo que remedia una injusticia histórica, la falta de una biografía en castellano sobre este militar. Guderian, Manstein y otros grandes del Ejército alemán han gozado de ediciones y reediciones mientras que este gran líder quedaba ninguneado (o recibía duras críticas por parte de autores italianos por su desaparición "in extremis" del frente de Túnez). Un general que, a diferencia de la mayoría de sus colegas, hizo una carrera "a la contra". No se hace grande en las ofensivas de 1939-42, sino en la defensa del 43-45, cuando brillar era difícil, casi imposible. Y también se ve metido en acciones poco frecuentes para un general, como matar a un enemigo de un bayonetazo (sí, hay generales rusos o italianos con muertos en combate en su cuenta, pero me parece que es algo excepcional).

Descubrimos aquí al combatiente de la Gran Guerra, al instructor del arma acorazada, al veterano de Barbarroja y Túnez, pero sobre todo, al líder de la retirada rusa, al defensor de los altos de Seelow.

De lo más recomendable.

[Buscaglia]

¡Qué pronto se acaba lo bueno! Llego ya a la última biografía. Y eso que he conseguido refrenarme y limitarme a una por día cuando lo que me pedía el cuerpo -y el libro- era acabar de un tirón sus 275 páginas de apretada escritura.

El artículo recupera al un oficial muy poco conocido, Martínez de Velasco, y su aventura en el Congo, que daría para películas y series de haber nacido en otra nación. En este caso, sí conocía al personaje por Historia 16 y porque la principal fuente, el periodista Vicente Talón, es una referencia para los aficcionados a la Historia militar en castellano y uno tiene ya los suficientes años para haber seguido sus artículos en prensa diaria (curiosa época aquella, cuando en un periódico se permitían incluir un amplio artículo sobre un excombatiente de la II Guerra Mundial ¡qué ocupaba más líneas que la crónica del Atletic!) antes de que pasase a dirigir la revista Defensa. Pienso que Vicente tuvo la mala suerte de intentar hacer su carrera en el País Vasco en un período en que lo que escribía no lograba apenas receptividad, pero ahí nos dejó su Memoria de la Guerra en Euskadi o su Vasconiana para las siguientes generaciones.

El artículo nos presenta unos hechos que seguro sorprenderán a muchos lectores, llevándonos a la convulsa década de los 60 en el Congo, a una terrible guerra civil donde los españoles jugaron su papel, pequeño cuantitativamente pero muy interesante cualitativamente.

Un colofón original a un libro diseñado, escrito y editado para lucir en la biblioteca de cualquier aficcionado a la Historia. En este caso, a la Historia con mayúsculas.

[Lutzow]

Yo estoy encantado porque este hilo me brinda la ocasión de retornar a Gran Capitán.

Me alegra mucho tu regreso Buscaglia, se te echaba de menos y el Foro necesita gente de tu valía...

El artículo sobre Saladino hará que nunca más ponga a mis alumnos "El reino de los cielos"

No es suficiente, alguno podría encontrar la copia y visionarla por error: Quémala.

Nuestro crítico oficial se ha dejado un artículo en el tintero, por razones obvias... Me estoy refiriendo a "Giovanni Messe, de soldado raso a Mariscal de Italia"... Tuve la fortuna de ser uno de los primeros en leerlo, al tocarme en suerte su corrección (si se puede llamar corregir a cambiar una coma y añadir una tilde en todo el texto...). Su lectura cumple lo que promete el título, un relato ameno sobre la vida de Messe, desde sus primeros pasos en la guerra contra Turquía hasta su glorioso final defendiendo Túnez, pasando por su innovadora labor durante la Primera Guerra Mundial y las distintas campañas en las que participó durante la Segunda, enfrentándose a un régimen tan arribista y corrupto como el fascismo italiano, cumpliendo siempre su cometido con vigor, eficacia e inteligencia, desmintiendo de una vez por todas el mito de la ineptitud de mandos y tropas italianos durante la WWII... Todo ello con el habitual estilo académico, profesional, al que nos tiene acostumbrados su autor, no exento de ese toque personal que conocemos los que seguimos sus trabajos en el Foro... En resumen, un artículo que por sí solo ya merecería la compra del libro...

Saludos.

[Tosk]

Has hecho justicia, amigo Lutzow: la vio de Messe es excelente, y ojo que no debe haber muchas biografías del mejor comandante italiano en la Segunda Guerra, así que insto a todos a leerla.

[Buscaglia]

Muchas gracias, pero he de confesar una cosa. El verdadero mérito del artículo es de alguno/algunos miembros de Gran Capitán, quienes me sugirieron a Messe. Yo iba en otra dirección, ahora me doy cuenta que errada, hacia generales como Nasi -para autores como De Bocca, el mejor general italiano de los años 30 y 40-; Cesare Ame, jefe del SIM (para Churchill, el más eficaz de los servicios militares italianos. Por cierto, el capitán Ame sirvió bajo Messe durante la Gran Guerra) o meros teóricos como Douhet. Pero reconozco que la sugerencia fue un acierto: Messe es un personaje muy interesante, con muchos puntos en paralelo con Rommel desde la Gran Guerra. Y, a la vez, un gran desconocido. Por ejemplo, en la biografía de Young sobre Rommel solo aparece su nombre una vez. En Cruzada en Europa, me parece que esta es la única referencia a su persona, como mero adorno en un varapalo contra Rommel: “El propio Rommel pudo escapar antes del desastre final, al parecer convencido de lo inevitable y con el único afán de salvar la piel. Había acabado con el mito de que él y los nazis eran invencibles. Von Arnim se rindió con las tropas alemanas y el mariscal Messe, que mandaba nominalmente todas las fuerzas, entregó el contigente italiano”.

Si consideramos que el general Speidel pensaba que el ejército italiano “se portó muy bien en Rusia y en condiciones mucho peores que en las de África” y también es algo consensuado que fue la campaña tunecina el episodio donde mejor combatieron los italianos, no parece que sea causalidad la jefatura de Messe en ambas ocasiones.

El único "pero" que le veo al personaje es que, ¡había tanto que contar! Así que los aspectos bélicos han quedado un tanto difuminados. Pero es que, si entro a fondo en el asalto al Col Moschin en 1918 o a la batalla de Stalino en 1942, no podría haber explicado porqué el Ejército italiano no funcionaba. Para eso tenía que dedicar algunas líneas, por lo menos unas pocas, a Badoglio, Cavallero, Pariani y Baitrocchi. Tampoco, siendo Messe uno de los mejores oficiales de arditi, podía dejar de explicar qué pasó con el movimiento en la posguerra... También había que hablar de la motorización del Regio Esercito... y entre una cosa y otra, quedó poco sitio para "la balacera".

Pero seguro que los compañeros se han enfrentado a este mismo problema en sus artículos y lo han sabido resolver muy bien.

[Penthea]

Mañana mismo empiezo con la lectura, que ya tengo horario de verano.

Por cierto, Mikel, me alegra muchísimo leerte de nuevo en EGC.

[Lutzow]

Mañana mismo empiezo con la lectura, que ya tengo horario de verano.

Perfecto, será un instructivo placer comparar tus críticas con las de Buscaglia... Y a ver si se animan más compañeros...

Saludos.

[Buscaglia]

Lo cierto es que seguro hay mucha curiosidad sobre lo que opinais -Penthea, Noviscum o Lutzow- sobre los artículos de Aníbal o Gainas.

A Messe y, en general a los generales del XIX y el XX, es más fácil valorarlos. Aunque respecto a Messe, siempre hay que ponderar "el factor Mussolini". Un par de anécdotas para evaluar su papel en la debacle. El Duce, ministro del Ejército, teóricamente impulsa la motorización y en un desfile de la primera brigada blindada se infla como una gallina clueca. Revisa orgulloso la unidad, “dotada del más moderno material”, pero su experto ojo no capta que lo que circula ante sí no es otra cosa que blindados de seis ruedas prestados por la Policía y repintados por el Ejército para la ocasión, además de los viejos Lancia IZM de la Gran Guerra.

En otra ocasión, tras una agria discusión con Badoglio sobre si los ascensos debían hacerse por méritos o por antigüedad, ordenó que un oficial fuera ascendido a general tras comprobar lo bien que mandaba y maniobraban sus tropas en una maniobras. Pero un par de horas después ordenó que no se cursase el ascenso. El argumento era que el militar era soltero: “Un general -dijo- debería ser el primero en comprender que sin hombres no se pueden formar divisiones”.

En fin, lo esperable de un hombre que una vez no pudo salir de su despacho de Palazzo Chigi porque descubrió que en el piso inferior había una momia egipcia. Allí se quedó, encerrado, hasta que se la llevaron.

[Penthea]

Esta noche empiezo por Aníbal...y mañana os cuento.

[Pablorojo]

Espero en mi proximo viaje a la Madre Patria hacerme con un ejemplar de Grandes Capitanes, ansioso por leer lo escrito por los amigos del Foro, disfruté bastante con el primer libro.....

Saludos.