El fotógrafo de Mathaussen

[Buscaglia]

Saludos.

Hace muchos, muchos años (quizá veinte o treinta) vi en televisión un documental que me impactó: "El fotógrafo de Mathaussen". Trataba de Boix, el republicano que ocultó los negativos de las aberraciones nazis en aquel campo y fue testigo de cargo en el proceso de Nuremberg. Gracias a aquellas pruebas documentales muchos monstruos que pretendían librarse "ya que no conocíamos aquellos terribles hechos" fueron situados en el campo y acabaron en la horca o en prisión. Yo, que venía de leer Los cerdos del comandante y Triángulo Azul, no pude menos que pensar ¡que peliculón saldría de aquí!

Porque el argumento lo tenía todo para un film de Oscar: conflicto, dilema moral, cine de juicios, momentos épicos (la pancarta en castellano con que saludan a los liberadores) y hasta la justicia poética del linchamiento de kapos y comandante del campo.

Vi que se rodaba la peli con esperanza. No soy muy de Mario Casas -mis alumnas, fans ciegas antes de conocerle, quedaron rebotadísimas durante el rodaje de Zugarramurdi- pero había visto un film en el que hacía un papel redondo -eso sí, de alimañero tosco- y me parecía que había crecido como actor. Y con un argumento así, parecía imposible pifiarla.

Pues me equivoqué. Y no por culpa de Casas, la culpa es coral. Ya la peli comienza con una idea equívoca, la de meter un niño en la historia sin ninguna necesidad o justificación. Pensaba que para emular La vida es bella o El niño del pijama de rallas, pero al final fue más del género hispano "Recluta con niño". Al ver la escena inicial y la voz en off, pensé, "Olé sus huev…. ¡Estos van a hacer como en 300 o en Dogville, cambian representar el escenario real por algo creado ad hoc!". Pero mi gozo en un pozo. En realidad querían reproducir el escenario real, pero sin dinero.

Y, así, uno a uno, se fueron diluyendo todos los pilares sobre los que haber hecho un buen film. La narración salta sin orden o concierto de lo irónico a lo moralista-simplón o a lo trágico. A veces se rueda con frialdad y distancia. Entonces te quieres creer que es como la serie Rebellion, algo buscado para que a la hora le cojas aprecio y odio a los personajes sin recurrir a trampas. Pero no, descubres que solo es incapacidad fílmica ya que hay mil trampas emotivas fallidas: pasan 5 minutos desfilando y tocando "T´attendrai toujour" alrededor de un ahorcado sin que te remueva nada por dentro o un kapo decide asesinar a un español que se ha reído de él y lo conduce al matadero mientras desarrolla una conversación que parece ser que Tarantino tiró a la papelera por mala e intrascendente. Y, lo peor, es que hay muchas escenas impostadas y pretenciosas que en realidad deberían describirse como "la estética del vuelo de una gallina".

¡Que nueva ocasión perdida!

[Satur]

Yo ya voy muy prevenido a cualquier película o serie española (ya lo amplío a cualquier país). Hay excepciones, claro, pero no seré yo el que ponga el pie en el agua para ver si está fría.