Jaro escribió:Si no es molestia ¿me explica alguien estos términos?
submunición
subcalibre
granada nodriza
Permite que te responda yo, que no es que sea un profesional, pero lo intentaré....
El calibre de un tubo es el diametro interior del tubo (llamado ánima), y que puede estar rayado o no (hay un hilo estupendo de Garand al respecto).
Cuando se dispara una munición en un tubo, el proyectil tiene que ocupar todo el diametro del ánima porque sino se escaparian los gases y se pedería fuerza de impulso, y por tanto aceleración y por tanto velocidad en boca del proyectil.
Por eso para un arma de un calibre se usan proyectiles de ese calibre.
Sin embargo ocurre que existe munición de menor calibre que el tubo (por eso subcalibrada), y que se dispara adosando a dicha munición unos
cacharros llamados
sabots que adaptan el calibre del proyectil al del tubo.
La granada nodriza, supongo que se refiere genericamente a la
munición cargo. Un proyectil no es más que un trozo de metal con forma aerodinámica para llegar muy lejos. Una vez que el proyectil llega al sitio que se quiere, no basta con que caiga, dependiendo de los efectos que se quieren conseguir, se usan diferentes tipos de proyectiles.
- Proyectiles rompedores: tienen una carga explosiva, que al impactar en el terreno (con espoletas de percusion instantanea), o a cierta altura del suelo (con espoleta de tiempo o de proximidad), explotan repartiendo metralla en una
zona letal.
- Proyectiles iluminantes: tienen unas bengalas, de manera que cuando el proyectil está sobre la zona requerida, explota, y salen las bengalas iluminado la zona requerida
- Proyectiles incendiarios y fumigenos: aqui ando algo más pez, pero siendo similar a los iluminantes, tienen unos botes con una mezcla quimica que produce humo/incendios
- Proyectiles cargo: tienen una carga interior de algo (bengalas, botes de humo o granadas) que dispersan a cierta altura sobre la zona requerida.
A la carga de los proyectiles cargo se les llama submuniciones
saludos
El éxito tiene muchos padres, pero el fracaso es huérfano.