Como todos sabemos, Isabel II fue destronada en 1868 por un movimiento cívico-militar dirigido por Serrano, Prim y Topete. Los militares que apoyaban a la reina hicieron un intento de derrotar a las fuerzas revolucionarias, situadas en su mayor parte en Andalucía y enviaron un ejército al mando del marqués de Novaliches, que se enfrentó a los rebeldes de Serrano en Alcolea.
El encuentro resultó indeciso aunque duro (unas 900 bajas), pero los leales a la reina considerando su causa perdida, se retiraron, dejando a los rebeldes expedito el camino de Madrid. La reina debió partir al exilio.
En el ejército realista figuraba Gaetano de Girgenti, esposo de la hija de la reina, la infanta Isabel 'La Chata'. Este, recientemente casado y acomplejado porque se pensaba que se había casado por el dinero de la infanta y su posición (él era un príncipe destronado de Italia), tenía el grado de coronel de húsares y quiso, gallardamente, participar en el combate en vez de permanecer el Madrid.
Cuentan testigos que su participación fue honrosa. Pero que mientras los realistas cargaron al grito de 'Viva la Reina' él lo hizo al de '¡Viva mi suegra!'
