En 1943, tras el fracaso habido en el intento de voladura de la roca de Gibraltar, en Berlín se pensó en uno de los planes mas osados de toda la segunda guerra mundial: la Operación Pelicano. La VI sección del RSHA deseaba hallar un golpe de efecto para asombrar de nuevo al mismísimo Fuhrer. Su jefe, Walter Schellemberg, pidió a Henrich Himler el hombre apropiado para llevar a cabo un ataque a las esclusas del Canal de Panamá.
El elegido resulto ser un tal Erich Gimpel, con un gran conocimiento de Latinoamérica por haber residido en Perú largo tiempo. Gimpel era un personaje frio y eficaz, pero hasta un agente secreto así no dejo de mostrar asombro ante la magnitud del proyecto que, acaso de tener éxito, iba a dejar a la poderosa US Navy sin un atajo considerable para unir los océanos mas grandes del planeta, lo mismo que a la marina mercante, que mes a mes crecía de forma vertiginosa merced a la construcción en serie de buques Liberty.
Erich Guimpel puso manos a la obra de inmediato, teniendo a su disposición todos los medios posibles: submarinos, aviones, armas, dinero y personal altamente especializado. Pero como para empezar a pensar seriamente en el ataque era preciso una persona con gran conocimiento de las instalaciones, se contacto con el ingeniero Hubrich, un alemán que había trabajado en puestos de responsabilidad de 1903 a 1914 en las obras hasta la misma apertura del Canal de Panamá. Este técnico conservaba todavía los planos y considero que atacando las esclusas –a pesar de su colosal tamaño:330 metros de longitud por 36 de anchura- no se lograrían resultados definitivos, toda vez que serian relativamente fáciles las reparaciones de emergencia para seguir permitiendo el paso de navíos. El consejo definitivo de Hubrich a Gimpel fue el siguiente:
El dique del lago de Gatun es una barrera que permite el reflujo de excedente, construido en solidísimo material. La cantidad de agua que contiene el Canal de Panamá y la presión que ejerce dicha masa son enormes. Sin embargo, los daños que un ataque aéreo podría provocar en una esclusa podrían repararse en un par de días. Haciendo saltar el dique, el resultado seria muy distinto. Esto es lo que sucedería: el agua retenida en el lago de Gatun se saldría del dique e iría a parar al mar. Durante su construcción, la mayor dificultad estribaba en la fuerte pendiente del canal. Si se consigue romper el dique, el canal permanecerá inutilizado al menos dos años, porque nada podrá contener al agua.
Después de oír este consejo técnico, Gimpel se mostró entusiasta, pues no en vano poseía los medios precisos para descargar un formidable golpe a las comunicaciones aliadas. Un par de bombarderos en picado del tipo Ju87- mas conocido como Stukas- debían ser transportados por dos submarinos oceánicos del tipo IX-C y actuar desde una isla desierta de la zona del Caribe. Era la primera vez que se intentaba la presencia de la todavía poderosa Luftwaffe en los cielos norteamericanos. Los aviones iban a viajar desmontado y cuidadosamente colocados en dos cajas sobre el casco de las dos unidades subacuaticas.
Cada aparato tendría que transportar dos bombas de 500 kilos.
Ante las dificultades que entrañaba el regreso, se daba por buena la perdida de los Stukas y sus cuatro tripulantes, siempre y cuando la misión fuera un éxito.
En una orilla del austriaco lago de Wansee se monto una inmensa maqueta del Canal de Panamá hasta en sus mas pequeños detalles y con todas sus esclusas. Según señala un historiador italiano.
...diariamente se entrenaban dos pilotos durante varias horas en la tarea de despegar y aterrizar en una playa, a bordo de bombarderos pesados y lentos. El final ataque al dique de Gatun se repetía muchas veces al día hasta convertirse en una acción mecánica. Los técnicos probaban una y otra vez desmontar y volver a montar los aparatos con el reloj en la mano. El entrenamiento y la perfección técnica les hicieron alcanzar el record de cumplir toda la misión en dos días. Entre las múltiples posibilidades, se tomo en consideración la de operar en un solo avión, caso de que el otro fuera alcanzado por la defensa enemiga. Todo estaba previsto. Todo estaba a punto en el mes de noviembre de 1943. Los dos U-Boote, con dos Stukas desmontados a bordo, no esperaban mas que la orden de comenzar. Luego se produjo inesperadamente el derrumbamiento. Se suspendió la operación. Los norteamericanos, advertidos, esperaban a los dos U-Boote en el vado del Mar del Norte.
Una fuga de información habría llegado al servicio de Inteligencia Británico y este se dio prisa en avisar del proyecto a la oficina OSS norteamericana. De esta forma fue abortada una misión cuyo éxito hubiera supuesto un desvio de 12.500 km a las flotas aliadas. También los japoneses planearon un ataque al Canal l pero la operación fue pospuesta al final.
Fuente: Revista Historia 16. Año XXIV Nº 294. Octubre del 2000.
Articulo: Hitler contra Estados Unidos.
"La Operacion Pelicano"
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nuked
Me pregunto las consecuensias que esto traería para el apoyo estadounidense a Inglaterra. Me parece que se hubiera venido un mal tiempo para los aliados en general.
