Mariscal y político nazi alemán. Nació el 12 de enero de 1893 en Rosenheim, Alemania y murió en Nuremberg el 15 de octubre de 1946.
En 1914 se alistó en el ejercito con el grado de Lugarteniente de Infantería y tiempo después fue transferido a la fuerza aérea como piloto de combate.
Goering fue el último Comandante del Escuadrón de Combate de la Richthofen, y se distinguió a como un As del aire; se le atribuye el haber derribado veintidós aviones de los Aliados, motivo por el cual fue galardonado con la Medalla al Mérito y con la Cruz de Hierro (Primera Clase). Después de la Primera Guerra Mundial fue contratado como piloto de prueba y piloto en Dinamarca y Suecia.
Los antecedentes aristocráticos de Goering y el prestigio que obtuvo como héroe de Guerra, lo convirtieron en el candidato ideal para la Infantería del Partido Nazi, por lo que Hitler lo eligió para que estuviera al mando de la SA, los Camisas Cafés, en diciembre de 1922. El Nazismo le ofreció al bravucón de Goering acción, aventura, camaradería y un escaparate para su elemental e irreflexiva hambre de poder.
En 1923 formó parte del alzamiento en el Salón de Cerveza de Munich; en estos actos resultó gravemente herido y se vio forzado a salir de Alemania durante cuatro años hasta que se declaró una amnistía general. Vivió en Austria, Italia y después en Suecia, donde fue internado en un hospital para enfermos mentales. En septiembre de 1925 fue ingresado a un asilo para internos peligrosos, convirtiéndose en un adicto a la morfina durante el curso de su larga recuperación.
En 1927 regresó a Alemania, reincorporándose al Partido Nacionalsocialista Alemán y fue electo como uno de sus primeros diputados del Reich un año más tarde. Los siguientes cinco años, Goering desempeñaría un papel muy importante en la preparación del camino para que Hitler tomara al poder, lo cual lo llevó a la Presidencia del Reich. En 1933 siguiendo al nombramiento de Hitler como Canciller, Goering fue nombrado Ministro del Interior de Prusia, Comandante en Jefe de la Policía Prusiana y de la GESTAPO, así como Comisionado para la Aviación.
Como fundador de la Policía Secreta junto con Himmler y Heydrich, puso en marcha los primeros Campos de Concentración para los oponentes políticos, demostrando una formidable energía para aterrorizar y eliminar cualquier resistencia y bajo el pretexto de una amenaza de un ataque comunista, Goering implementó una serie de decretos emergentes que terminaron con los últimos remanentes de los derechos civiles en Alemania para arrestar a los comunistas, a los Social Demócratas y prohibió la prensa izquierdista.
Su carrera política continuó en ascenso y logra un control dictatorial para dirigir la economía en Alemania, amasando una gran fortuna personal.
Goering solía autonombrarse “El Caballero de Hierro”o “El último hombre del Renacimiento” y gustaba de dar un toque teatral a sus excesos de poder; tal vez esto es lo que hacía que fuera tan popular entre las masas germanas, quienes lo veían como el ideal varonil y honesto. Era mucho más accesible que el propio Fuhrer, y a menudo se confundían sus bravatas extrovertidas y su vitalidad con calidez humana.
Después del Pogromo de las Noches de Cristal del 9 de noviembre de 1938 (Kristallnacht), fue Goering el que multó a la comunidad germano-judía con un billón de marcos y ordenó la eliminación de los judíos de la economía germana, la “arianización” de sus propiedades y negocios y su exclusión de las escuelas, lugares de recreo, parques, bosques, etcétera.
También fue Goering el que instruyó a Heydrich el 31 de julio de 1941 a “llevar a cabo todos los preparativos en relación con una solución general (Gesamtlosung) del problema de los judíos en esos territorios de Europa los cuales estaban bajo la influencia Alemana....”.
Goering se identificaba con las aspiraciones Territoriales de Hitler, prefirió dictar una nueva orden para Europa por “medios diplomáticos” en vez de a través de una guerra Europea. En 1939 fue nombrado Presidente del Consejo del Reich para la Defensa Nacional y designado oficialmente como el sucesor de Hitler;Goering dirigió la campaña de la Luftwaffe en contra de Polonia y Francia y fue promovido a Mariscal del Reich el 19 de junio de 1940.
Durante agosto de 1940 se lanzó en contra de la Gran Bretaña; La Operación Águila sirvió para convencer de que él sacaría a la Real Fuerza Aérea (RAF) de los cielos y aseguraría la rendición de los Británicos solo con la Luftwaffe. Sin embargo, Goering perdió el control de la Batalla de Bretaña y cometió un error táctico fatal lo que salvó a las estaciones de control sectorial de la RAF de la destrucción y les proporcionó un tiempo muy valioso para recuperarse. El fracaso de la Luftwaffe (la cual nunca perdonó Hitler) provocó el abandono de la Operación León Marino, la planeada invasión de Inglaterra, comenzando el eclipse político de Goering.
Los constantes fallos de la Luftwaffe en el frente Ruso y su poca eficiencia para defender a la misma Alemania de los bombardeos de los Aliados, subrayaron la incompetencia de Goering para ser su Comandante Supremo.
Goering se hundió rápidamente en un letargo y en un mundo de ilusiones; se había convertido en una sombra abotagada de lo que el había sido. Desacreditado, aislado y cada vez más despreciado por Hitler, el cual lo culpaba de las derrotas Alemanas, su personalidad se fue desintegrando.
Cuando Hitler dijo que debía permanecer en el bunker de Berlín hasta el final, Goering, que se había marchado a Bavaria, mal entendió esto y pensó que era una abdicación, por lo que se aprestó a tomar el mando de inmediato. Sin embargo, fue retirado de todos sus cargos, expulsado del Partido y arrestado. Poco después, el 9 de mayo de 1945, Goering fue capturado por las fuerzas del Séptimo Regimiento de los Estados Unidos y fue llevado a juicio en Nuremberg en el año de 1946.
Durante su juicio, Goering quien había adelgazado en la prisión y se había rehabilitado de su adicción a las drogas, se defendió a sí mismo con un vigor agresivo y tal habilidad, que puso en evidencia la participación del fiscal. Con la muerte de Hitler se distinguió entre los enjuiciados como la personalidad predominante, diciéndoles a los otros prisioneros que hacer en el juicio y adoptando poses de un heroísmo motivado por su creencia de que sería inmortalizado como un mártir Alemán. Sin embargo, Goering no pudo convencer a los jueces, quienes lo encontraron culpable de los cargos de conspiración en la guerra, crímenes en contra de la paz, crímenes de guerra y crímenes en contra de la humanidad.
No se encontraron atenuantes y Goering fue sentenciado a morir en horca. El 15 de octubre de 1946 dos horas antes de su ejecución, fue encontrado muerto; se suicidó en su celda de Nuremberg tomando una cápsula de veneno la cual había logrado ocultar de sus guardianes durante su cautiverio.
Fuentes consultadas;
http://www.tareasya.com/noticia.php?noticia_id=3024