Central Nuclear de Juragua
Publicado: 19 Jun 2007
En la década de los setenta Cuba y la Unión Soviética pactan un acuerdo para acabar con los problemas de suministro energético que posee cuba, ya que debe importar la mayoría de los combustibles que necesita para generar electricidad. La solución es la construcción de una central nuclear en la isla, capad de suministrar la energía necesaria.
Es en 1976 cuando se firma el acuerdo entre la URSS y Cuba para construir una central nuclear que disponga de dos reactores de 440 Megavatios. Estaría situado en Juragua, que esta en la provincia de Cienfuegos.
Los reactores de origen soviético serian los primeros diseñados por estos para funcionar en el clima tropical (el VVER-440), la propia instalación tendría que estar preparada para soportar las violentas climatologías que puede llegar a soportar la isla: tormentas tropicales, huracanes…
Los reactores tendrían que ser capaces de generar cerca del 25-30 % de la energía que consumía la isla.
Las obras comenzaron en 1983 y se preveía que estuviera operativo el primer reactor en 1995. Los ingenieros cubanos no tenían experiencia en este tipo de centrales así que los soviéticos tenían que ir paso a paso para ayudarlos a construir la central nuclear.
Pero la caída de la Unión Soviética en 1991 se tradujo en un paran en la construcción y una vuelta a las negociaciones con el nuevo gobierno de Rusia.
En 1992 la construcción civil del primer reactor estaba al 97% y la del segundo al 30%, en cuanto a equipos instalados solo el primer reactor tenía algunos y al parecer bastante básicos.
En 1995 se empieza a intentar movimientos por parte del gobierno ruso y cubano para finalizar la central nuclear, el problema es la falta de dinero: 800 millones de dólares. Se recurre a una corporación internacional formada por varios países para que aporten dinero y participen en el proyecto, varios países europeos parecen estar interesados.
La Agencia de Energía Atómica Internacional apoya a Cuba en el desarrollo de planes de seguridad para la central y sus reactores. Varias son las noticias a partir de 1997 que desde el gobierno ruso y cubano indican que se van a reiniciar las obras para acabar la construcción pero no se llegan a materializar.
Un grabe problema de seguridad se cernía sobre la central, la refrigeración del reactor en el medio tropical y la exposición a medios corrosivos a la que se exponían todas las partes de la instalación. La seguridad de la futura planta estaba en entredicho.
Aunque la respuesta del gobierno cubano a las acusaciones de falta de seguridad fueron que la tecnología del reactor era otra diferente a la de Chernobyl, que era capaz de resistir maremotos y terremotos de elevada intensidad (la central esta situada junto al mar).
El gran opositor a este proyecto siempre fue el “vecino” del norte, Estados Unidos, ya que estaba a 350 km en línea recta de las costas de Florida. En la década de los 80 inatento oponerse a la central a través de presiona a la Agencia de Energía Atómica Internacional, en los 90 tras la caída de la URSS, amenazo con sanciones económicas a los países que apoyaran el proyecto para terminar la central nuclear, en especia a Rusia.
Los USA también alegan que un accidente en la central podría llevar una nube radioactiva por todo el caribe, América centra y Norteamérica.
A principios de la presente década se termino por dar carpetazo al asunto, quedando solo las Ruinas a medio construir de lo que una vez fue "la obra del siglo XX en Cuba".
Es en 1976 cuando se firma el acuerdo entre la URSS y Cuba para construir una central nuclear que disponga de dos reactores de 440 Megavatios. Estaría situado en Juragua, que esta en la provincia de Cienfuegos.
Los reactores de origen soviético serian los primeros diseñados por estos para funcionar en el clima tropical (el VVER-440), la propia instalación tendría que estar preparada para soportar las violentas climatologías que puede llegar a soportar la isla: tormentas tropicales, huracanes…
Los reactores tendrían que ser capaces de generar cerca del 25-30 % de la energía que consumía la isla.
Las obras comenzaron en 1983 y se preveía que estuviera operativo el primer reactor en 1995. Los ingenieros cubanos no tenían experiencia en este tipo de centrales así que los soviéticos tenían que ir paso a paso para ayudarlos a construir la central nuclear.
Pero la caída de la Unión Soviética en 1991 se tradujo en un paran en la construcción y una vuelta a las negociaciones con el nuevo gobierno de Rusia.
En 1992 la construcción civil del primer reactor estaba al 97% y la del segundo al 30%, en cuanto a equipos instalados solo el primer reactor tenía algunos y al parecer bastante básicos.
En 1995 se empieza a intentar movimientos por parte del gobierno ruso y cubano para finalizar la central nuclear, el problema es la falta de dinero: 800 millones de dólares. Se recurre a una corporación internacional formada por varios países para que aporten dinero y participen en el proyecto, varios países europeos parecen estar interesados.
La Agencia de Energía Atómica Internacional apoya a Cuba en el desarrollo de planes de seguridad para la central y sus reactores. Varias son las noticias a partir de 1997 que desde el gobierno ruso y cubano indican que se van a reiniciar las obras para acabar la construcción pero no se llegan a materializar.
Un grabe problema de seguridad se cernía sobre la central, la refrigeración del reactor en el medio tropical y la exposición a medios corrosivos a la que se exponían todas las partes de la instalación. La seguridad de la futura planta estaba en entredicho.
Aunque la respuesta del gobierno cubano a las acusaciones de falta de seguridad fueron que la tecnología del reactor era otra diferente a la de Chernobyl, que era capaz de resistir maremotos y terremotos de elevada intensidad (la central esta situada junto al mar).
El gran opositor a este proyecto siempre fue el “vecino” del norte, Estados Unidos, ya que estaba a 350 km en línea recta de las costas de Florida. En la década de los 80 inatento oponerse a la central a través de presiona a la Agencia de Energía Atómica Internacional, en los 90 tras la caída de la URSS, amenazo con sanciones económicas a los países que apoyaran el proyecto para terminar la central nuclear, en especia a Rusia.
Los USA también alegan que un accidente en la central podría llevar una nube radioactiva por todo el caribe, América centra y Norteamérica.
A principios de la presente década se termino por dar carpetazo al asunto, quedando solo las Ruinas a medio construir de lo que una vez fue "la obra del siglo XX en Cuba".
menos mal que me he fijado que son ruinas, que si no. aunque no pillo mucho su relacion con el aspecto militar