Resistencia.Origen y teoría.
Publicado: 09 Jun 2007
La Resistencia para los que la vivieron pudo ser una epopeya individual con una suma inmensa de valor y heroismo, sin olvidar el romanticismo inherente de las aventuras armadas, por contra y contrariamente a la leyenda popular, no fue algo que alcanzara a las poblaciones ocupadas en general.La población en mayor parte permanecía al margen, como ejemplo claro se podría citar a la población francesa durante la segunda Guerra Mundial, solo un 1% de la población tomó parte efectiva en la Resistencia, aceptando sus riesgos mortales.La Resistencia solo fue una epopeya militar en cierto modo en Yugoslavia y Polonia. Por definición, la guerra irregular rehuye el combate a cara descubierta.Se ataca al enemigo por la espalda. Sus hazañas no pueden compararse con la de las grandes batallas como Verdun, Kursk, Stalingrado o Normandía.
La Resistencia fue otro asunto.Fue la primera gran guerra revolucionaria de la Historia, con ella apareció por primera vez, y aun nivel jamás alcanzado, a un nuevo combatiente, el partisano, así como un gran número de armas nuevas y de medios no convencionales.Nunca fue más cierta con la Resistencia la archifamosa frase de Clausewitz sobre la guerra como continuación de la politica por otros medios, no solamente ayudó a la derrota militar del Eje, sino que sobre todo, llevó su total destrucción política e ideológica.Sin embargo en los países situados al oeste de Europa, no alcanzó el objetivo de subversión total como en el este.
De hecho, en vísperas de la guerra mundial, nadie imaginaba el desarrollo que podría alcanzar la guerra irregular,nadie pensaba que está fuera previsible, ni entre los países del Eje, ni entre los Aliados.Ningún estado mayor había previsto por adelantado los planes de una guerra de caracter revolucionario a escala del continente europeo, sin embargo el concepto de partisano había sido ya profundamente modificado y en parte el concepto de guerra irregular estaba en parte aceptado.
La Conferencia internacional de La Haya de 1907, en su Reglamento sobre las "Leyes y costumbres de la guerra en tierra", articulo IV, había definido en que condiciones los combatientes irregulares podían beneficiarse de los derechos y privilegios de los regulares.
1º-Tener a su frente una persona responsable de sus subordinados.
2º-Tener un signo distintivo fijo y reconocible a distancia.
3º-Llevar ostensiblemente sus armas.
4º-Atenerse en sus operaciones a las leyes y costumbres de la guerra.
Además,"la población que toma espotáneamente las armas" quedaba asimilada a las fuerzas regulares a condición de que observase las condiciones 3 y 4.Estas disposiciones excluían al combatiente irregular o partisano de los derechos del combatiente regular (tratamiento especial de prisioneros de guerra y heridos entre otras).El partisano era de esta forma considerado como un criminal de derecho común.Era lícito ponerlo fuera de combate por condenas sumarias y medidas represivas excepcionales, con exclusión de sanciones colectivas asimilables a los crimenes de guerra.
El mismo Reglamento, al tratar de las poblaciones civiles en territorio ocupado, precisaba que éstas eran puestas bajo la obediencia de la potencia ocupante con respecto a las disposiciones que dictase de conformidad con el derecho de guerra.Los funcionarios y la policía debían proseguir su trabajo y ser tratados consecuentemente por la potencia ocupante.El conjunto de estas disposiciones se apoyaba sobre la distinción fundamental establecida hacía dos siglos en Europa entre combatiente regular y combatiente irregular.Distinción que evitaba a la población civil quedar asimilada al enemigo.La entrada en escena del partisano moderno y de la resistencia organizada alteraría dicho equilibrio.
Todas las potencias europeas contemporáneas habían acogido favorablemente el Reglamento de 1907. Así, durante la Primera Guerra Mundial, al acusar Alemania a Bélgica de promover francotiradores en los territorios ocupados,el gobierno belga defendió con fuerza lo que antes estaba considerado como un crimen.Sin embargo un cuarto de siglo más tarde los países ocupados practicaron activamente la resistencia armada y se vanagloriaron de ello. Este es un claro ejemplo de cuánto había cambiado en poco tiempo el concepto de partisano.
Teoria del partisano.Rusia.
El catalizador de este cambio en la concepción europea de la guerra y consecuencia directa fue la revolución bolchevique de 1917.
Lenin y sus seguidores planificaron desde el principio su proyecto de conquista mundial por medio de la guerra revolucionaria.Consecuentes consigo mismos, repudiaron las reglas de uso en Europa desde el siglo XVII.Estas reglas habían puesto limites a la guerra y, con un esfuerzo de dominio sobre los instintos agresivos, habían sustraido al soldado el odio al enemigo.Estaban destinadas a suavizar la agresividad, a conseguir que el enemigo no fuese considerado y tratado como un criminal. Este cambio venía derivado de la lengua latina que usaba dos vocablos para referirse al enemigo relativo (hostis) del enemigo absoluto (inimicus).Este avance de la civilización de la guerra iba a quedar arruinado por la introducción del pueblo heterogéneo como aliado del estado bolchevique.
Lenin fue el primero en advertir la misión que incumbiría al partisano armado en la guerra revolucionaria, nacional o intenacional. Desde su "¿Que hacer?" escrito en 1902 para fijar las tareas del partido bolchevique, la concepción de partisano estuvo presente desde el principio.Percibió el principio esencial de la guerra revolucionaria, el partisano al ser irregular, era la viva negación del orden establecido, el agente privilegiado para la destrucción de las estructuras sociales.Aunque Lenin tuvo pocas ocasiones para poner en práctica esta intuición.Los bolcheviques tomaron el poder y en las operaciones militares contra los ejércitos blancos recurrieron muy poco a la guerrilla.
Fue Stalin y por su instigación la totalidad de los partidos comnistas en los países ocupados, quienes desencadenaron con toda su ferocidad la guerra de los partisanos, tras la invasión alemana de 1941.Conseguiría asociar dos fuerzas diferentes, tales como patriotismo y comunismo, o más concretamente la autodefensa patriótica contra la invasión extranjera y la agresividad revolucionaria contra el enemigo ideológico.
Esta asociación servirá luego de modelo a todas las luchas de guerrilas en los procesos de descolonización. Su mayor éxito fue en yugoslavia, por otra parte no se pudo llevar a término su proyecto de subversión total ya que fueron rápidamente absorbidos por las fuerzas favorables a una normalización, se necesitó la ayuda del ejército soviético para imponer los regímenes comunistas en la parte de Europa que había conquistado.
La Resistencia fue otro asunto.Fue la primera gran guerra revolucionaria de la Historia, con ella apareció por primera vez, y aun nivel jamás alcanzado, a un nuevo combatiente, el partisano, así como un gran número de armas nuevas y de medios no convencionales.Nunca fue más cierta con la Resistencia la archifamosa frase de Clausewitz sobre la guerra como continuación de la politica por otros medios, no solamente ayudó a la derrota militar del Eje, sino que sobre todo, llevó su total destrucción política e ideológica.Sin embargo en los países situados al oeste de Europa, no alcanzó el objetivo de subversión total como en el este.
De hecho, en vísperas de la guerra mundial, nadie imaginaba el desarrollo que podría alcanzar la guerra irregular,nadie pensaba que está fuera previsible, ni entre los países del Eje, ni entre los Aliados.Ningún estado mayor había previsto por adelantado los planes de una guerra de caracter revolucionario a escala del continente europeo, sin embargo el concepto de partisano había sido ya profundamente modificado y en parte el concepto de guerra irregular estaba en parte aceptado.
La Conferencia internacional de La Haya de 1907, en su Reglamento sobre las "Leyes y costumbres de la guerra en tierra", articulo IV, había definido en que condiciones los combatientes irregulares podían beneficiarse de los derechos y privilegios de los regulares.
1º-Tener a su frente una persona responsable de sus subordinados.
2º-Tener un signo distintivo fijo y reconocible a distancia.
3º-Llevar ostensiblemente sus armas.
4º-Atenerse en sus operaciones a las leyes y costumbres de la guerra.
Además,"la población que toma espotáneamente las armas" quedaba asimilada a las fuerzas regulares a condición de que observase las condiciones 3 y 4.Estas disposiciones excluían al combatiente irregular o partisano de los derechos del combatiente regular (tratamiento especial de prisioneros de guerra y heridos entre otras).El partisano era de esta forma considerado como un criminal de derecho común.Era lícito ponerlo fuera de combate por condenas sumarias y medidas represivas excepcionales, con exclusión de sanciones colectivas asimilables a los crimenes de guerra.
El mismo Reglamento, al tratar de las poblaciones civiles en territorio ocupado, precisaba que éstas eran puestas bajo la obediencia de la potencia ocupante con respecto a las disposiciones que dictase de conformidad con el derecho de guerra.Los funcionarios y la policía debían proseguir su trabajo y ser tratados consecuentemente por la potencia ocupante.El conjunto de estas disposiciones se apoyaba sobre la distinción fundamental establecida hacía dos siglos en Europa entre combatiente regular y combatiente irregular.Distinción que evitaba a la población civil quedar asimilada al enemigo.La entrada en escena del partisano moderno y de la resistencia organizada alteraría dicho equilibrio.
Todas las potencias europeas contemporáneas habían acogido favorablemente el Reglamento de 1907. Así, durante la Primera Guerra Mundial, al acusar Alemania a Bélgica de promover francotiradores en los territorios ocupados,el gobierno belga defendió con fuerza lo que antes estaba considerado como un crimen.Sin embargo un cuarto de siglo más tarde los países ocupados practicaron activamente la resistencia armada y se vanagloriaron de ello. Este es un claro ejemplo de cuánto había cambiado en poco tiempo el concepto de partisano.
Teoria del partisano.Rusia.
El catalizador de este cambio en la concepción europea de la guerra y consecuencia directa fue la revolución bolchevique de 1917.
Lenin y sus seguidores planificaron desde el principio su proyecto de conquista mundial por medio de la guerra revolucionaria.Consecuentes consigo mismos, repudiaron las reglas de uso en Europa desde el siglo XVII.Estas reglas habían puesto limites a la guerra y, con un esfuerzo de dominio sobre los instintos agresivos, habían sustraido al soldado el odio al enemigo.Estaban destinadas a suavizar la agresividad, a conseguir que el enemigo no fuese considerado y tratado como un criminal. Este cambio venía derivado de la lengua latina que usaba dos vocablos para referirse al enemigo relativo (hostis) del enemigo absoluto (inimicus).Este avance de la civilización de la guerra iba a quedar arruinado por la introducción del pueblo heterogéneo como aliado del estado bolchevique.
Lenin fue el primero en advertir la misión que incumbiría al partisano armado en la guerra revolucionaria, nacional o intenacional. Desde su "¿Que hacer?" escrito en 1902 para fijar las tareas del partido bolchevique, la concepción de partisano estuvo presente desde el principio.Percibió el principio esencial de la guerra revolucionaria, el partisano al ser irregular, era la viva negación del orden establecido, el agente privilegiado para la destrucción de las estructuras sociales.Aunque Lenin tuvo pocas ocasiones para poner en práctica esta intuición.Los bolcheviques tomaron el poder y en las operaciones militares contra los ejércitos blancos recurrieron muy poco a la guerrilla.
Fue Stalin y por su instigación la totalidad de los partidos comnistas en los países ocupados, quienes desencadenaron con toda su ferocidad la guerra de los partisanos, tras la invasión alemana de 1941.Conseguiría asociar dos fuerzas diferentes, tales como patriotismo y comunismo, o más concretamente la autodefensa patriótica contra la invasión extranjera y la agresividad revolucionaria contra el enemigo ideológico.
Esta asociación servirá luego de modelo a todas las luchas de guerrilas en los procesos de descolonización. Su mayor éxito fue en yugoslavia, por otra parte no se pudo llevar a término su proyecto de subversión total ya que fueron rápidamente absorbidos por las fuerzas favorables a una normalización, se necesitó la ayuda del ejército soviético para imponer los regímenes comunistas en la parte de Europa que había conquistado.