Creo que en esto hay dos cuestiones:APV escribió:Eso no está tan claro, los británicos estaban preocupados por la situación en el Índico: los japoneses invadiendo Malasia y Birmania, y los británicos ocupando Madagascar. Históricamente tuvieron que sacar fuerzas del norte de África y estar moviendo portaaviones entre el Mediterráneo y el Índico.LSanzSal escribió:Sin embargo no tengo nada claro que afectase a Torch, operación imprescindible, al menos ante Stalin. Probablemente tampoco se hubiese afectado a las operaciones en Egipto (aparte que la posición de Rommel era indefendible una vez los aliados desembarcasen en Marruecos y Argelia).
En esta situación si los estadounidenses quedaban mermados en el Pacífico los japoneses podían presentar batalla con más fuerza en el Índico (para aislar Australia y presionar sobre la India). Imaginaos el raid del Índico meses antes y manteniendo una fuerza permanente en la zona; eso obligaría a la Eastern Fleet o a presentar una batalla de portaaviones (en inferioridad) o a entregar totalmente ese océano al control japonés.
El resultado podría ser demoledor e influir en el Mediterráneo donde se necesitan portaaviones para evitar la agonía de Malta por el cerco.
- La inglesa (y de rebote, norteamericana). La prioridad era Europa, es decir, la URSS (que en 1942 pasó las de Caín) por lo que era imprescindible mantener alguna presión sobre Alemania. No tiene sentido conservar Rabaul o Ceilán si a cambio Stalin es derrotado y se pierde la guerra.
De hecho en la operación Pedestal participaron cinco portaaviones, que hubiesen tenido un efecto inmediato en el Índico. Además los primeros portaaviones de escolta (incluyendo los capaces Sangamon) fueron enviados al Atlántico.
Creo que la única posibilidad de forzar una intervención inglesa masiva sería un intento de cierre de las rutas del Índico, pero teniendo en cuenta que la única realmente valiosa era la del Golfo Pérsico y la URSS.
- La japonesa. No olvidemos que sus objetivos eran China (para el Ejército) y las Indias Orientales y un anillo de protección, para la Marina.
Una invasión de la India, incluso de Ceilán, implicaría comprometer un gran contingente del Ejército, que hasta 1944 no se planteó cesar las operaciones ofensivas en China, y que racaneaba unidades para otros teatros. Para la marina, casi peor, porque implicaría movilizar una gran fracción del tonelaje, tanto militar como civil, para la invasión. En una operación excéntrica, que dejaría el Pacífico Central e incluso Japón (como Doolittle demostró por si alguien tenía dudas) abierto a ataques norteamericanos.
Yamamoto temía un ataque contra Japón, en parte por riesgos concretos (la familia imperial según indica Luis de la Sierra) en parte por el efecto sobre la población japonesa (en 1904 las noticias de un escuadrón ruso cerca de Tokio causaron un tumulto). Luego dudo mucho que comprometiese una fracción importante de la flota para periodos prolongados en el Índico. Y destacar solo una parte era la mejor forma de perderla, la Eastern Fleet inglesa era bastante potente y podía dar cuenta de agrupaciones de cruceros o de portaaviones ligeros.
Un factor extra era que la India era un bocado muy grande, con un enorme ejército, grandes extensiones aptas para los tanques, etcétera. No era el ideal para los japoneses.
- La nuestra. Nosotros sabemos que ni Inglaterra ni USA iban a negociar, por lo que la única posibilidad, si existía en 1942, de victoria para el Eje (dejando aparte lo de las armas atómicas) era derrotar a la URSS. Lo que pasaba por el cierre de la ruta del Índico, y por un ataque a Siberia Oriental. Ninguna de las dos acciones eran críticas para la URSS, pero en 1942 le faltó poco para el desastre.
Una estrategia sensata hubiese pasado por abandonar todos los teatros periféricos a su suerte (Egipto, Francia, Noruega, las operaciones por atolones en el quinto pino o en Australia) y concentrarse en aislar y destruir al principal oponente, que además era el único que podía ser derrotado por el Eje: la URSS. Aceptando derrotas en otros escenarios.
Ene se caso para Japón la “estrategia correcta” hubiese sido, sobre todo tras destruir los portaaviones norteamericanos, cooperar con Alemania. Algo así como:
- Tras alcanzar el “perímetro seguro” que pudiera estar en las Indias Orientales Holandesas, enclaves en Nueva Guinea, Rabaul y las Salomón Occidentales, cesar las operaciones ofensivas (nada de Port Moresby) y fortificarse, aceptando que los aliados contraataquen y conquisten algo. Incluso Rabaul hubiese sido prescindible.
- Cerrar el Pacífico Norte a la navegación rusa, algo muy sencillo para Japón.
- Atacar en el Índico, tomando bases desde las que cortar la navegación aliada y aislar la India (de rebote, el Golfo Pérsico): las Cocos, Andaman, Maldivas, tal vez Reunión…
- Atacar la Siberia Oriental. No con idea de conquistar nada sino solo fijar a los rusos y atraer reservas. Si se podía cortar el Transiberiano, mejor.
La estrategia sería muy arriesgada: a los norteamericanos les podría dar por contraatacar en Marcus, Rabaul, incluso intentar socorrer las Filipinas. Pero ¿qué vale más? ¿Corregidor, o la guerra? Aparte que los portaaviones rápidos podrían contraatacar en un plazo más o menos breve.
Saludos