Ad blocker detected: Our website is made possible by displaying online advertisements to our visitors. Please consider supporting us by disabling your ad blocker on our website.
Excelente reseña realizada por Lasalle sobre este libro de la editorial Desperta Ferro:
El Ejército español de José Napoleón (1808-1813)
Luis Sorando Muzás
Páginas: 512 + 24 en color
ISBN: 978-84-946499-1-2
Desperta Ferro ediciones.
Madrid, 2018.
Precio : 26,95€ IVA incluido
Ya en su dedicatoria Luis Sorando Muzás plantea el problema de este ejército español enemigo de los españoles : A la memoria de todos aquellos que, equivocados o no, no dudaron en ofrecer sus vidas en defensa de lo que consideraban mejor para su patria. Para el autor, ya no existen “los buenos” que combatieron contra los franceses y “los malos” que se unieron al invasor ; pasados dos siglos y apagadas las pasiones, sólo quedan hombres que pensaron en el bien de su patria. No se tratará pues en lo sucesivo de enjuiciar las acciones de unos o de otros sino de estudiar la historia de estos regimientos y describir sus uniformes.
El libro se divide en 21 capítulos que abordan todos los cuerpos del ejército napoleónico en España durante el breve periodo del reinado de José I o sea, durante los seis años de 1808 a 1813.
Es mejor permanecer con la boca cerrada y parecer un idiota, que abrirla y confirmarlo...
----------------------------------------------------- Ab insomne non custita dracone
Hay mucho qué hacer aún en esa línea. Respecto al bando contrario, mejor conocido, el otro día aluciné leyendo una carta de Espoz y Mina, que acabó mandando en Navarra 9 regimientos, a un amigo: "Usted no sabe qué gente es la que tengo. Me hallo en la triste situación de contar por momentos la existencia de mi vida. Necesito prontamente gastar unos cartuchos para hacerme temer y, cuando estoy a solas, me parece ver delante una mano armada de un puñal en actitud de partirme el corazón". Entre su tropa patriotas, pero también penados, vagabundos, desocupados, desertores, malhechores y tránsfugas suizos, alemanes, polacos e italianos de Napoléon.
Seguro que el Ejército afrancesado también da muchas sorpresas.
Según reza una antigua inscripción en la portada de la iglesia de Otxate, cuando el mundo era joven, solo habitaban la tierra y los océanos seres primordiales a los que no resultaba agradable contemplar. Extraños y deformes, procedentes del vacío y las estrellas. En una época aún arcana, estos seres primordiales se ocultaron más allá del tiempo, pero dejaron su semilla. Cthulhu engendró a los seres de la tierra; Dagón, a los marinos, y Derleta, a los lunares.
Hay mucho qué hacer aún en esa línea. Respecto al bando contrario, mejor conocido, el otro día aluciné leyendo una carta de Espoz y Mina, que acabó mandando en Navarra 9 regimientos, a un amigo: "Usted no sabe qué gente es la que tengo. Me hallo en la triste situación de contar por momentos la existencia de mi vida. Necesito prontamente gastar unos cartuchos para hacerme temer y, cuando estoy a solas, me parece ver delante una mano armada de un puñal en actitud de partirme el corazón". Entre su tropa patriotas, pero también penados, vagabundos, desocupados, desertores, malhechores y tránsfugas suizos, alemanes, polacos e italianos de Napoléon.
Seguro que el Ejército afrancesado también da muchas sorpresas.
Y es más : existen casos que estaban con las tropas francesas, que se pasaron a la guerrilla y después volvieron con los franceses que los recibieron como si no hubiera pasado nada. No consigo entender cómo se podía (bueno, podia ... mejor dicho se intentaba) formar tropas con prisioneros que se cambiaban de bando por las buenas y apenas armados cogían y se iban con sus amigos de enfrente. Personalmente nunca he tenido mucha estima por los hermanos de NApoleón, pero José era un verdadero desastre en plan militar, como administrador civil tal vez ...
P.D. : Me he tomado la libertad de editar los mensajes que atribuían a un tal Gabacho lo que era obra mía. Devolvamos al César lo que es del César, y viceversa
"Mi corazón es para ti, mi sangre para el Emperador, mi vida para el honor." (Carta de Lasalle a su esposa)
"El hombre que más ha vivido no es el que ha contado más años sino el que más ha sentido la vida." (J.-J. Rousseau)
"Todo lo vivido aprovecha, de una u otra forma. Excepto para los fanáticos y los imbéciles." ("Hombres buenos" A. Pérez Reverte)
----------------------------------------------------- Ab insomne non custita dracone
Algo que se me ha hecho raro es eso de llamarle "José Napoleón", cosa que nunca he oído en Francia. Seamos lógicos : el emperador se llamaba Napoleón Bonaparte, el padre de todos sus hermanos y hermanas se llamaba Bonaparte y por consiguiente todos los hijos se llamaban Bonaparte. Llamar a José “Napoleón” es atribuirle el nombre de su hermano como apellido en vez de llamarlo con el de la familia. Claro que el hermano era emperador, lo que no está dado a todo el mundo, pero bueno ...
Me suena mejor "José Bonaparte", aunque sólo sea por las iniciales "JB"
"Mi corazón es para ti, mi sangre para el Emperador, mi vida para el honor." (Carta de Lasalle a su esposa)
"El hombre que más ha vivido no es el que ha contado más años sino el que más ha sentido la vida." (J.-J. Rousseau)
"Todo lo vivido aprovecha, de una u otra forma. Excepto para los fanáticos y los imbéciles." ("Hombres buenos" A. Pérez Reverte)
----------------------------------------------------- Ab insomne non custita dracone
Lasalle escribió:
Me suena mejor "José Bonaparte", aunque sólo sea por las iniciales "JB"
Hablando de JB, una pregunta Lasalle: ¿José Bonaparte era tan aficionado a la bebida como se dice en España o es mas una "leyenda urbana" para desprestigiar al contrario?
Saludos.
Pepe
-------------------------------------- Ab insomne non custita dracone
Parece que esta fama no la ha tenido en ningún sitio (estuvo en Nápoles, por ejemplo) menos en España. No digo que no echaba una copa de vino con la comida o una de champán en ocasiones, pero nunca llegó a estar borracho como dejaría entender la fama que le han puesto. Tampoco su hermano era muy aficionado a la bebida a pesar de todas las marcas de coñac que lo reivindican ; bebía un poco de Chambertin cortado con agua durante las comidas.
De José se ha dicho también que era tuerto, o manco ... Propaganda.
Lo del apodo de Botellas, me parece haber leído en alguna parte (¿ pero dónde ?) que se lo habían dado por haber distribuido a la tropa botellas de vino encontradas en una bodega española. Si es cierto, es una actitud muy diferente de la de un aficionado a la bebida
"Mi corazón es para ti, mi sangre para el Emperador, mi vida para el honor." (Carta de Lasalle a su esposa)
"El hombre que más ha vivido no es el que ha contado más años sino el que más ha sentido la vida." (J.-J. Rousseau)
"Todo lo vivido aprovecha, de una u otra forma. Excepto para los fanáticos y los imbéciles." ("Hombres buenos" A. Pérez Reverte)
----------------------------------------------------- Ab insomne non custita dracone
Roi d'Espagne (1808 – 1813)
Joseph Bonaparte règne sous le nom de Joseph-Napoléon Ier dès son arrivée en Espagne
[Rey de España (1808 – 1813) -- José Bonaparte reina bajo el nombre de José-Napoleón I en llegando a España"]
Dicho esto, hay que reconocer que es muy poco usual llamarlo así.
Durante su reinado se le conoció con el apodo de Pepe Botella, en referencia a un supuesto alcoholismo, que parece seguro que no era cierto. El pueblo de Madrid también le apodó El rey plazuelas, puesto que abrió muchas plazas en la capital, principalmente derribando iglesias y conventos. La más importante fue la plaza de Oriente, delante del Palacio Real.
"Mi corazón es para ti, mi sangre para el Emperador, mi vida para el honor." (Carta de Lasalle a su esposa)
"El hombre que más ha vivido no es el que ha contado más años sino el que más ha sentido la vida." (J.-J. Rousseau)
"Todo lo vivido aprovecha, de una u otra forma. Excepto para los fanáticos y los imbéciles." ("Hombres buenos" A. Pérez Reverte)
----------------------------------------------------- Ab insomne non custita dracone
El pecado de José era la lujuria. Sobre todo, porque nos salía muy cara. No es que pagase a sus amantes, es que agasajaba todavía más a sus maridos. Por ejemplo, el marido de la Montehermoso nos salió carísimo: el titulo de "Grande" (sería por la alzada midiendo la cornamenta), puestos remunerados tipo "Real Comisario de los Teatro de España y donaciones en metálico.
Como militar no puedo juzgarlo pero leyendo su correspondencia parece cualquier cosa menos tonto. E Incluso le planta cara a su hermano -¿egoísmo o ético?- cuando este intenta desmembrar España.
En el Ejército español a su servicio, cuando concluyó la guerra, hubo miles de exculpaciones afirmando "Estaba allí para evita matanzas"... "Ayudaba a los patriotas desde el otro lado de la trinchera"... Y lo curioso es que muchos cargos del bando patriota hicieron de valedores y prestaron testimonio para exculpar a los militares españoles que apoyaron a José. No sé si por corporativismo, por relaciones personales o por fe en que, realmente, estaban con Francia para paliar males mayores.
Según reza una antigua inscripción en la portada de la iglesia de Otxate, cuando el mundo era joven, solo habitaban la tierra y los océanos seres primordiales a los que no resultaba agradable contemplar. Extraños y deformes, procedentes del vacío y las estrellas. En una época aún arcana, estos seres primordiales se ocultaron más allá del tiempo, pero dejaron su semilla. Cthulhu engendró a los seres de la tierra; Dagón, a los marinos, y Derleta, a los lunares.
Roi d'Espagne (1808 – 1813)
Joseph Bonaparte règne sous le nom de Joseph-Napoléon Ier dès son arrivée en Espagne
[Rey de España (1808 – 1813) -- José Bonaparte reina bajo el nombre de José-Napoleón I en llegando a España"]
Dicho esto, hay que reconocer que es muy poco usual llamarlo así.
Efectivamente es que esa es la denominación correcta, y la que aparece de manera oficial en documentos y monedas.
Si nos vamos a la Constitución de Bayona de 1808: En el nombre de Dios Todopoderoso: Don José Napoleón, por la gracia de Dios, Rey de las Españas y de las Indias:
Habiendo oído a la Junta Nacional, congregada en Bayona de orden de nuestro muy caro y muy amado hermano Napoleón, Emperador de los franceses y Rey de Italia, protector de la Confederación del Rhin, etc.
Hemos decretado y decretamos la presente Constitución, para que se guarde como ley fundamental de nuestros Estados y como base del pacto que une a nuestros pueblos con Nos, y a Nos con nuestros pueblos. http://www.cervantesvirtual.com/portale ... .html#I_0_
En Francia también le denominaban así:
Y tenemos el caso de otro hermano, Jerome Bonaparte, rey de Westfalia como Jerome Napoleón:
En este caso para no confundirse con su hermano JN, utilizaba la cifra HN con la H de Hieronymus
"Con más facilidad se les llama bravos a los audaces que seguros a los prudentes".
pepero escribió:¿José Bonaparte era tan aficionado a la bebida como se dice en España o es mas una "leyenda urbana" para desprestigiar al contrario?
Creo que el remoquete de "Pepe Botella" viene de que al comienzo de su reinado bajó los impuestos que gravaban bebidas alcohólicas y naipes, para congraciarse a sus nuevos súbditos. Los contrarios aprovecharon para decir que el motivo era que le gustaba empinar el codo. A ello hace referencia la siguiente caricatura.
"No sé lo que hay que hacer, esto no es una guerra".
Lord Kitchener
----------------------------------------------------- Ab insomne non custita dracone
Roi d'Espagne (1808 – 1813)
Joseph Bonaparte règne sous le nom de Joseph-Napoléon Ier dès son arrivée en Espagne
[Rey de España (1808 – 1813) -- José Bonaparte reina bajo el nombre de José-Napoleón I en llegando a España"]
Dicho esto, hay que reconocer que es muy poco usual llamarlo así.
Efectivamente es que esa es la denominación correcta, y la que aparece de manera oficial en documentos y monedas.
Si nos vamos a la Constitución de Bayona de 1808: En el nombre de Dios Todopoderoso: Don José Napoleón, por la gracia de Dios, Rey de las Españas y de las Indias:
Habiendo oído a la Junta Nacional, congregada en Bayona de orden de nuestro muy caro y muy amado hermano Napoleón, Emperador de los franceses y Rey de Italia, protector de la Confederación del Rhin, etc.
Hemos decretado y decretamos la presente Constitución, para que se guarde como ley fundamental de nuestros Estados y como base del pacto que une a nuestros pueblos con Nos, y a Nos con nuestros pueblos. http://www.cervantesvirtual.com/portale ... .html#I_0_
En Francia también le denominaban así:
Y tenemos el caso de otro hermano, Jerome Bonaparte, rey de Westfalia como Jerome Napoleón:
En este caso para no confundirse con su hermano JN, utilizaba la cifra HN con la H de Hieronymus
Efectivamente, como menciona Flavius, José Bonaparte se hacía presentar como José Napoleón en las acuñaciones y sellos de su reinado. Curiosamente también lo hizo Murat en Nápoles, a pesar de que él sí que no era hermano de Napoleón...hermano de sangre claro; hermano político lo era por matrimonio.
Lasalle escribió:De José se ha dicho también que era tuerto, o manco ... Propaganda.
Lo de tuerto era por su uso del monóculo en público; creo recordar haberlo leído por ahí.
Buscaglia escribió:El pecado de José era la lujuria. Sobre todo, porque nos salía muy cara. No es que pagase a sus amantes, es que agasajaba todavía más a sus maridos. Por ejemplo, el marido de la Montehermoso nos salió carísimo: el titulo de "Grande" (sería por la alzada midiendo la cornamenta), puestos remunerados tipo "Real Comisario de los Teatro de España y donaciones en metálico.
La lujuria y la "mano larga"; ya hubo polémica en su reinado en Napolés a la hora de conceder patentes de corso a gente que después partía la pana con él...vamos, que se quedaba un porcentaje del botín sin declararlo a las autoridades imperiales
Buscaglia escribió: E Incluso le planta cara a su hermano -¿egoísmo o ético?- cuando este intenta desmembrar España.
Es algo que comenta Charles Esdaile en su libro sobre las Guerras Napoleónicas, algo que harán todos los hermanos de Napoleón, sobrevivir. Ellos querían ser reyes, fundar dinastías y dejar un legado a sus hijos, y para ello tenían que llegar a un pacto de legitimación ante sus súbditos, por eso defendían sus intereses y les preocupaban cosas que a Napoleón no le preocupaban. Fueron esos motivos los que llevarían al agrio enfrentamiento entre José y Napoleón...aunque no llegaría a tanto como el que tuvo con Luis sobre Holanda, dónde llegó a derrocarle y a anexionarse directamente el país.
Buscaglia escribió:En el Ejército español a su servicio, cuando concluyó la guerra, hubo miles de exculpaciones afirmando "Estaba allí para evita matanzas"... "Ayudaba a los patriotas desde el otro lado de la trinchera"... Y lo curioso es que muchos cargos del bando patriota hicieron de valedores y prestaron testimonio para exculpar a los militares españoles que apoyaron a José. No sé si por corporativismo, por relaciones personales o por fe en que, realmente, estaban con Francia para paliar males mayores.
O quizás lo típico en las post-guerras, sobre todo en los bandos derrotados; "yo no fui", y si fui "lo hice pero poco", o "era un plan secreto para conocer los secretos del enemigo", o cualquier otra excusa
Lo de Pepe Botella, era más cosa de la propaganda contra él como encarnación de la ocupación francesa. No es que fuera abstemio precisamente...pero tampoco era aficionado a cogerse borracheras.
El momento ideal para ser un héroe, es aquél en que se ha acabado la batalla y los otros tipos han muerto, que Dios los tenga en su gloria, y tú te llevas todo el mérito. Harry Flashman
El pecado de José era la lujuria. Sobre todo, porque nos salía muy cara. No es que pagase a sus amantes, es que agasajaba todavía más a sus maridos. Por ejemplo, el marido de la Montehermoso nos salió carísimo: el titulo de "Grande" (sería por la alzada midiendo la cornamenta), puestos remunerados tipo "Real Comisario de los Teatro de España y donaciones en metálico.
Como militar no puedo juzgarlo pero leyendo su correspondencia parece cualquier cosa menos tonto. E Incluso le planta cara a su hermano -¿egoísmo o ético?- cuando este intenta desmembrar España.
En el Ejército español a su servicio, cuando concluyó la guerra, hubo miles de exculpaciones afirmando "Estaba allí para evita matanzas"... "Ayudaba a los patriotas desde el otro lado de la trinchera"... Y lo curioso es que muchos cargos del bando patriota hicieron de valedores y prestaron testimonio para exculpar a los militares españoles que apoyaron a José. No sé si por corporativismo, por relaciones personales o por fe en que, realmente, estaban con Francia para paliar males mayores.
No es que fuera tonto. Como administrador tenía cualidades, lo demostró en Nápoles, intentó demostrarlo en España, pero siempre se enfrentó con sus súbditos por tener un defecto enorme : era un rey impuesto por un invasor y esto estorbó en gran medida una actividad que tal vez hubiera podido ser benéfica.
En el dominio militar, es harina de otro costal. De estratega, nada. Sólo le faltaba que en España los mariscales allí presentes fueran cada uno a su aire, llevados por ambiciones propias y enemistades con los otros colegas. Y además tomándole por el tonto de turno por faltarle la autoridad que le sobraba al hermano.
Con lo de "Colaboré con el enemigo porque era miembro de la Resistencia" un buen montón de canallas se salvó del paredón cuando la Liberación de Francia a finales de los años 40.
"Mi corazón es para ti, mi sangre para el Emperador, mi vida para el honor." (Carta de Lasalle a su esposa)
"El hombre que más ha vivido no es el que ha contado más años sino el que más ha sentido la vida." (J.-J. Rousseau)
"Todo lo vivido aprovecha, de una u otra forma. Excepto para los fanáticos y los imbéciles." ("Hombres buenos" A. Pérez Reverte)
----------------------------------------------------- Ab insomne non custita dracone
Ya en tiempos de la Guerra de Independencia el General Marbot criticaba la actitud de José como ilógica. He aquí lo escribía en sus Memorias :
¿ Era posible que una guerra llevada de esta forma engendrara buenos resultados ? … ¡Ya que el Emperador no podía o no quería venir, tenía que haber nombrado a uno de sus mejores mariscales al mando superior de todos los ejércitos de la Península, y castigado con la mayor severidad a quienes no le obedecían! Por cierto Napoleón había designado como su lugarteniente al rey José ; pero éste, hombre de un carácter muy amable, donoso, culto, pero totalmente ignorante de la cosa militar, se había convertido en juguete de los mariscales, que no aplicaban sus órdenes y hasta consideraban su presencia entre las tropas como un estorbo. Es innegable que la excesiva bondad de este rey le llevó a cometer muchos errores, entre los que el más grave fue resistir a la voluntad del Emperador, respecto a la conducta que se tenía que mantener en relación con los militares españoles que las tropas francesas hacían prisioneros en los campos de batalla. Napoleón ordenaba que se enviaran a Francia como prisioneros de guerra, con el fin de disminuir el número de nuestros enemigos en la Península mientras que José, a quien le repugnaba combatir contra hombres a quienes llamaba sus súbditos, se hacía en contra de nosotros el defensor de los españoles. Estos, abusando de su credulidad, se apresuraban, apenas capturados, de gritar : “¡ Viva nuestro buen rey José !” y perdían que los dejaran tomar servicio entre sus tropas. José, a pesar de todas las observaciones de los mariscales y generales franceses, tenía tanta confianza en la lealtad castellana, ¡ que creó una guardia y un ejército numeroso compuesto únicamente con los que habíamos hecho prisioneros ! … Estos soldados, bien pagados, bien alimentados y bien pertrechados, eran fieles a José mientras todo prosperaba ; pero, al menor revés, desertaban a miles, y , yendo a reunirse con sus compatriotas sublevados, se servían contra nosotros de las armas que el rey les había dado ; esto no impedía que José volviera a creer en la sinceridad de sus afirmaciones, cuando, hechos prisioneros una vez más, pedían otra vez que los recibiéramos en los regimientos josefinos. Más de 150.000 hombres pasaron así de un partido al otro, y como José les hacía vestir prontamente cuando volvían cubiertos de harapos, los españoles le habían llamado “gran capitán del pertrecho”.
¡ Las tropas francesas, descontentísimas con este sistema, un como tonel de las Danaides, que hacía que la guerra se convirtiera en una situación sin fin, devolviendo al enemigo los soldados que le habíamos tomado, y que servían constantemente contra nosotros! Muy a menudo el Emperador también manifestó su descontento provocado por este abuso, pero no consiguió que desapareciera ! Por su parte, Napoleón contribuía también y mucho al reclutamiento perpetuo de enemigos que después combatía en España y Portugal, ya que, por no querer debilitar el ejército francés de allende el Rin, había intimado a los aliados que le proporcionaran una parte de las tropas estipuladas en los tratados, y dirigido estas tropas hacia la Península, con el fin de ahorrar la sangre francesa. La razón era sin duda muy loable, pero las circunstancias hacían que la aplicación de este sistema fuera no solamente impracticable sino perjudicial a nuestra causa.
"Mi corazón es para ti, mi sangre para el Emperador, mi vida para el honor." (Carta de Lasalle a su esposa)
"El hombre que más ha vivido no es el que ha contado más años sino el que más ha sentido la vida." (J.-J. Rousseau)
"Todo lo vivido aprovecha, de una u otra forma. Excepto para los fanáticos y los imbéciles." ("Hombres buenos" A. Pérez Reverte)
----------------------------------------------------- Ab insomne non custita dracone
