Esta es la historia final de un desconocido pero gran piloto japonés en su Ki-51 "Sonia", el Tai-i (Capitán) Saburo Shimada. Fue su último vuelo sobre el Pacífico antes de ser derribado por el famoso escritor y piloto estadounidense Charles Lindbergh, quien relató en parte la acción.
Un combate aéreo como muchos que se dieron en el Pacífico. El resultado final fue el que marcaba la baraja, pero debe ser calificado de épico dado la ámplia desventaja de los defensores y la aptitud y determinación final de nuestro protagonista.
Tripulaciones delante de un moteado Ki-51 "Sonia".
El viernes, 28 de julio de 1944, se perfilaba como un día rutinario más. Tras desayunar, Lindbergh (Si , no os habeis equivocado... el famoso Charles Lindbergh) y otros pilotos llegaron a la pista de aterrizaje de Biak al amanecer y despegaron poco después, su destino eran las pistas de aterrizaje japonesas en la gran isla de Ceram en las Molucas, que según se informa se concentran masivas unidades de cazas.
Una tormenta casi obligó al CG a cancelar la misión. Habían subido a 5.500 m pero todavía no podían superarla. Sin embargo, la formación mixta compuesta por "dieciocho" P-38 Lightning de los 49th y 475th FG siguieron adelante. Cuando se acercaron a las pistas de aterrizaje japonesas, el clima se despejó, pero al descender a 3.000 m, no se observaron aviones enemigos sobre las pistas. Los japoneses eran expertos en camuflar aviones y despegar rápidamente si era necesario cuando aparecían cazas estadounidenses.
Estos continuaron hacia los seleccionados objetivos secundarios, pero nada parecía merecer la pena. Luego giraron y así regresar a Biak, cuando, de repente, las radios cobraron vida con los "ecos" de un dogfight...
"Ahí están. ¡Entra y derríbalo!"
"¿No puede alguien derribarle?"
"Maldita sea, me he quedado sin municiones!"
Ni Lindberg ni ningún otro del 475th pudieron observar la acción y el Colonel MacDonald se comunicó por radio pidiendo la localización del combate. Dos Mitsubishi Sonias, aviones biplazas de reconocimiento ya superados, lentos y con tren de aterrizaje fijo, los Sonias tampoco se destacaban por su maniobrabilidad. Al parecer, regresaban de una misión de rescate aéreo para uno de sus pilotos derribados cuando llamaron la atención de uno de los pilotos del 49th FG (en clave "Captive " Squadron), estos volaban por encima, y ?? ...se produjo una melée.
Formación de P-38 sobre Nueva Guinea mediados de 1944.
Uno de los Mitsubishis era pilotado por el veterano Tai-i (Capitán) Saburo Shimada, y el otro por el Gunso (Sargento) Saneyoshi Yokogi del 73 Chutai.. Pese a todos sus ataques, los pilotos estadounidenses se vieron superados por la hábil pareja japonesa.
Se escuchó por radio:"¡El «hijo de puta» nos está moneando!"
Pareja de Mitsubishi Ki-51.
Dos de los pilotos de la 49th FG finalmente consiguieron colocarse a cola de los Mitsubishis,. El Lt Wade D. Lewis alcanzó a uno de los "Sonia" en el ala izquierda, esta acabó incendiada. Pero cuando este se enderezó para escapar el Lt J.C. Haslip persiguió al Ki.51 pintado en verde moteado del Gunso Yokogi y tras disparar una larga ráfaga a sus "seis" este planeó largamente intentando posiblemente un amerizaje, finalmente cayó al mar.
Esta situación dejaba sólo al Tai-i Shimada, que durante casi tres minutos esquivó con éxito a todo el "Captive Squadron" (Escuadron Cautivo), había dejado a varios de ellos sin municiones, y además durante el combate aéreo habilmente los había acercado hasta la base japonesa y los cañones antiaéreos del aeródromo de Amahi.
Mientras tanto, el grupo de MacDonald estaba "buscando frenéticamente el avión enemigo". Se agruparon alrededor de un palpitante Lightning, vieron las bocanadas de humo y el fuego de cañones de 20 milímetros que revelaba el combate. MacDonald lideró el ataque, lanzó sus tanques de combustible y disparó una pequeña ráfaga que alcanzó el ¡¡Sonia!! sin embargo este no pareció lastimarlo. Shimada en ese momento estaba atrapado, lo sabía y decidió morir luchando. Sacudió su avión a la izquierda en un violento picado que pilló a los pilotos del grupo de MacDonald con la guardia baja. Dos de los pilotos del 475th pensaron que lo tenían derribado, pero justo cuando estaban a punto de presionar los gatillos, con una feroz maniobra, Shimada desapareció magistralmente de sus miras. Detras de ellos venía Lindbergh.
El avión japonés acababa de salir de su giro desgarrador, su camuflaje verde moteado contrastaba con la brillante y roja insignia del Sol Naciente. El Colonel MacDonald solo podía ver cómo las puntas de las alas del Ki 51 dejaban estelas de condensación mientras agitaba su avión en un esplèndido giro a la izquierda. Cuando Shimada se encontró cara a cara con el "Águila Solitaria", voló hacia él a una velocidad combinada de "500 millas" por hora (vel max del Sonia, 423 km/h a 3.000 metros). Shimada disparó a Lindbergh. El propio Lindbergh instintivamente se enfiló con la vista puesta en el motor radial de Mitsubishi y presionó los botones. Su P-38 se estremeció al retroceder durante al menos seis segundos cuando los dos aviones se cerraron en una carrera de colisión sin fin. Los bits de la hélice de Shimada volaron, fue golpeado gravemente, pero parecía decidido simplemente a estrellar su avión contra el de Lindbergh. En el último momento posible, Lindbergh tiró del poste con todas sus fuerzas. Shimada también se detuvo, "intentando chocar con su adversario", pero Lindbergh lo esquivó por unos pocos pies, tal vez incluso pulgadas. Estaba lo suficientemente cerca como para sentirse estremecido por el impacto aéreo cuando sobrepasó el supuesto ¡¡¡Cero!!!, que cayó en espiral hacia adelante dejando una estela de humo negro hasta que finalmente salpicó el mar.
El miembro del ala de Lindbergh, el Lt Joseph E. "Fishkiller" Miller también había disparado sobre el avión japonés, pero como declaró después: "...estuve allí, el viejo consiguió acertar de pleno el Sonia... disparé viendo desprenderse algunas piezas del ala, pero fue la victoria del Sr. Lindbergh ". Las felicitaciones estaban a la orden del día cuando Lindbergh y el 475th volvieron a la base.
Thomas B McGuire (izq.) debate con Charles Lindbergh (decha.) sobre una misión a "Bial Island" en julio de 1944.
El épico combate de Shimada terminó con un breve salpicón de espuma que marcó su muerte. Años más tarde, el más que Colonel MacDonald expresó su admiración por el piloto, que sin ayuda puso en brete a todo un Squadron de P-38.
Fuentes:
Aces High: The Heroic Saga of the Two Top-Scoring American Aces of World War II (Bill Yenne).
The Aviators: Eddie Rickenbacker, Jimmy Doolittle, Charles Lindbergh, and ... (Winston Groom).
http://gunnyg.blogspot.com/2003_10_12_g ... chive.html
http://pwencycl.kgbudge.com/K/i/Ki-51_Sonia.htm
Saludos.
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